Siempre ha habido estilos de música que por su propia genética y génesis han tenido menos seguidores o menos apoyo. Probablemente la música instrumental, sea uno de esos géneros.
La banda de hoy viene desde Francia y no necesitarán abrir la boca para sorprenderte. Totorro tiene solo dos discos en su haber, pese a que hará casi 11 años que se formó, si bien fue en 2011 cuando se convirtió en algo más formal, cuando a los guitarristas Jonathan Siche y Christophe Le Flohic se les unió Xavier Rosé en el bajo y Bertrand James a cargo de la batería.
El primero de los dos álbumes lleva el nombre de Home Alone (2014), música que podríamos escuchar con absoluta tranquilidad en un trayecto por la campiña francesa en coche, con canciones como Osao San o Festivalbini a destacar.
Dos años después de este primer LP volvían a la palestra con su segundo disco, Come To Mexico (2016), una entrega algo más compleja y elaborada, con una curiosa historia a compartir en su nombre. El título del álbum se debe a que durante sus primeros conciertos en el país galo, un par de mexicanos que acudían a estos les gritaban “Come to Mexico!”.
Y el resto de la historia, ya lo conocéis.
No tenemos en la actualidad noticias de un futuro disco, pero esperemos que no se demoren demasiado, hay más hambre de post-rock instrumental del mejor nivel.
La música instrumental te hace sentir sin la necesidad de palabras, lo cual no es precisamente una ventaja, sino que más bien implica una alta dificultad y es algo que Totorro consigue sin despeinarse.
